Una tendinitis es una de las afecciones más comunes que solemos sufrir, debido a una inflamación o irritación de los tendones. En general, se usa más el término de tendinopatía o tendinosis cuando hablamos de la afectación de la estructura del tendón y no sólo a la inflamación que se produce en la zona afectada.Los tendones son las fibras que fijan los músculos a los huesos.
Las tendinitis más comunes suelen ser en los hombros, los codos y las rodillas. Hoy vamos a ocuparnos de la tendinitis de hombro, que es una de las dolencias que más vemos en los pacientes que acuden a nuestra clínica.
Frecuentemente, las tendinitis más frecuentes en esta parte de nuestro cuerpo son aquellas relacionadas con el manguito rotador. Este manguito rotador es el conjunto de los tendones de los músculos supraespinoso (suele ser el más afectado), infraespinoso, redondo menor y subescapular.
Las causas por las que se produce una tendinitis en el hombro suelen ser las caídas y golpes, gestos muy repetitivos o movimientos bruscos. También pueden suceder de repente, sin causa aparente.
Sin duda, el dolor a la hora de mover nuestra articulación. Si no lo movemos no tiene por qué doler, aunque si no es tratado a tiempo, pueden incluso aparecer dolores en estático.
El dolor no solo aparece tras un traumatismo, sino que también se manifiestan con incomodidad e incluso dolor a la hora de meterse en la cama. En los casos más graves también se verá afectada la movilidad de la articulación, llegando incluso a lo que se denomina «hombro congelado» lo que requiere mucho más trabajo un tratamiento más complejo.
Lo primero que debemos hacer es tener cuidado para no empeorar la lesión. Luego, también podemos aplicar hielo o agua fría en la zona para ayudar a reducir la inflamación (no es necesario mucho tiempo, con unos diez minutos es suficiente).
Luego, contactaremos LO ANTES POSIBLE con nuestra clínica de fisioterapia, donde podrán darnos un diagnóstico y una solución a nuestro problema. Sobre todo, en caso en el que sepamos la causa por la que se ha producido la tendinitis. Además, mientras tanto, podemos intentar mover nuestro hombro lo que nos sea posible sin sufrir mucho, para evitar que nuestro hombro se quede «congelado».